Sanación 21 Septiembre 10

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 Sanación 21 de Septiembre de 2010. Equinoccio de Otoño.

 Estamos en tiempos de transición. Transición a la integración con el Amor, con Dios Padre. Este es un tiempo de trabajo arduo en lo individual sirviendo en lo colectivo. Es reconocer que soy un ser de Luz, que Dios Padre ha compartido conmigo su poder y su sabiduría, que soy una parte infinitesimal de Dios Padre, reconocer que Él está en mi y que lo debo amar con todo mi corazón. “Yo soy Yo”. Pero también debo reconocer que los demás seres humanos son seres de Luz, que comparten los mismos dones que Dios Padre me ha dado y que merecen mi respeto por que son una creación de El. Debo entonces servir a mi prójimo y amarlo como a mi mismo. “Yo soy Tu, Tu eres Yo.” Las dos grandes enseñanzas de Jesús, Mica. Este es el único camino para evolucionar en el Amor y trascender en esta transición.

En este tiempo de transición todos los seres humanos debemos unirnos fraternalmente por una sola causa: nuestro planeta. La Madre Tierra debe ser nuestra máxima prioridad porque si ella perdiese el equilibrio, ya nada tendría sentido. Esta sanación se llevo a cabo en Chichen Itzá frente al Castillo y mientras canalizabamos la energía de Amor de Dios Padre apareció arriba de nostors un pequeño arco iris. Los mayas de la región que nos observaban se dieron cuenta y nos dijeron que esa era una señal de que eramos bienvenidos, que los mayas también entendían que debiamos darle a la Madre Tierra algo de nosotros como agradecimiento a todo lo que ella nos brindaba. Al final cantamos el Himno a la Alegria.